Más de cuatro mil millones de pesos fueron autorizados por el gobierno federal para el consorcio Asociación Público Privada (APP) Arriaga-Tapachula, S.A. de C.V., a la que le fue otorgada la concesión para la reparación y mantenimiento de la carretera costera que ahora se encuentra convertida en una verdadera trampa mortal para quienes circulan por ella. Solo dos carriles operan en muchos de los tramos y en pésimo estado. Los trabajos que se realizan van peor que a paso de tortuga.
Casi todos los días se reportan accidentes con saldos graves, de fallecidos, lesionados y daños materiales que en este año son incuantificables; ello aparte de la constante descompostura de las unidades automotrices que circulan por esa vía de comunicación que es de suma importancia para el comercio internacional, las exportaciones e importaciones entre México y Centroamérica. Eso no parece interesarle a los funcionarios de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) que se hacen de la “vista gorda” ante la grave irresponsabilidad de la empresa concesionaria.
Ya llevan más de un año y ni un solo tramo ha quedado concluido en forma adecuada; en aquellos en donde supuestamente ya se rehabilitó todo el pavimento, con las lluvias se ha deteriorado sobremanera. El compromiso era que en 24 meses la carretera quedara totalmente nueva en sus 475 kilómetros y de ahí, darle el mantenimiento permanente durante diez años. Hoy, es una de las vías de comunicación de las más peligrosas del país para circular por ella.
Una declaración de Oscar Rigoberto Coello Domínguez, en su calidad de titular de la Residencia General de Conservación de Carreteras de la SCT en Chiapas –no sabemos si siga ocupando el cargo, porque ni el directorio de funcionarios aparece en las páginas oficiales de la dependencia-, señalaba que el consorcio tenía el compromiso de mantener todo el tramo en buen estado y con los estándares de calidad aceptado por la SCT y si no cumplían existía una sanción económica que repercute en los pagos para la misma. Quizá, el funcionario no se ha dado una vuelta por la carretera y tampoco escucha las quejas de empresarios del transporte regional de la Costa y Soconusco que se quejan de su estado desastroso.
En las redes sociales, muchas personas lanzan la alerta y advierten del peligro de circular en esa carretera, incluso plantean que no se maneje de noche al multiplicarse los riesgos. Otros dicen que es una trampa mortal que ha cobrado muchas vidas, porque prácticamente solamente operan dos carriles –ida y vuelta-, mientras que los otros están cerrados por rehabilitación, pero no existe la suficiente señalización. Familias completas han perdido la vida en accidentes por esa causa.
Durante toda la administración federal anterior no se destinaron recursos para el mantenimiento de las carreteras y cuando se hizo, fue para concesionar el tramo al consorcio APP Arriaga-Tapachula, que ha mostrado una gran irresponsabilidad en la ejecución de los trabajos. Lamentablemente, la SCT no interviene cuando está obligada a hacerlo y aplicar sanciones si fuese necesario, pero todo parece indicar que existiera confabulación entre funcionarios y empresarios, pero quienes sufren las consecuencias son los habitantes de esta región, transportistas y empresarios exportadores e importadores que movilizan miles de toneladas de productos diarios por la vía terrestre.
Surge la interrogante: ¿Cómo impulsar el desarrollo económico si ni vías de comunicación terrestre en buen estado tenemos? Las quejas ya se elevaron hasta el titular de la SCT, Javier Jiménez Espriú, por parte de algunos organismos empresariales y ojalá se encuentre eco, antes que sigan ocurriendo tragedias por circular en una carretera en estado de desastre.
A escena
Una dura llamada de atención hicieron a las autoridades de salud, luego de incrementarse en forma considerable los casos de dengue en Chiapas, no solamente los que se contabilizan, sino los que aparecen en las ciudades y comunidades, por lo que tanto en el centro del estado como en la costa se emprendieron acciones para contrarrestar la presencia del mosco transmisor. En Huixtla, se intensificaron las thermonebulizaciones y control larvario en más de 30 colonias, incluyendo instituciones educativas, abarcando más de tres mil 500 viviendas, en una acción conjunta entre las autoridades municipales y la Jurisdicción Sanitaria VII, que han hecho llamados a la sociedad a participar en la estrategia de limpia, tapa, tira y volea para evitar los recipientes con agua en donde se reproduce el zancudo Aedes Aegypti que también transmite el zika y chikungunya… La emergencia migratoria en la frontera sur parece no tener fin y en lugar de vislumbrarse una solución se agudiza, tanto que tiene meses que no acude a la zona ningún funcionario de alto nivel del Instituto Nacional de Migración para dar una respuesta a las tantas demandas que existen no solamente de centroamericanos sino también de haitianos, cubanos, africanos y asiáticos que tienen meses que no pueden abandonar la zona, pero que tampoco se han instrumentado acciones de atención en materia de salud suficientes. En Tapachula, la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) ya instaló otras oficinas para la atención de extranjeros solicitantes de asilo, si bien no se ocuparon las instalaciones de la Terminal de Almacenamiento y Reparto de Pemex, sí a pocos metros de ellas y ya está generando inconformidad entre comerciantes y habitantes de la zona, quienes consideran que les causarán problemas… Empiezan a rendirse los informes del primer año de gobierno en los Ayuntamientos municipales de la entidad, pero ¿Cuántos alcaldes tendrán realmente algo importante que informar a la sociedad? La mayoría se ha pasado quejando que sus antecesores no les dejaron nada y se han dedicado a inventar listas de supuestos apoyos a ciudadanos para desviar recursos públicos. Es más, en casi todos, está incrustada la familia del edil o alcaldesa y eso no es visto por la Auditoría Superior ni el Congreso del Estado… Hasta la próxima.
(iM-rrc)
